CHAÑARCILLO (Ruinas y Breve Historia)

RUINAS DEL MINERAL DE CHAÑARCILLO

La primera referencia de Chañarcillo proviene del año 1747 en que se registran ya algunas vetas del mineral.

En 1832 es definitivamente descubierto por el cateador y arriero Juan Godoy, trasformándose la mina de plata de Chañarcillo en una de las tres minas más importantes de este metal a nivel mundial, Su explotación causó el enorme auge económico y político de la región y Chile, en la segunda mitad del siglo 19.

Otra consecuencia de la explotación de Chañarcilo fue la construcción del primer ferrocarril de Chile entre Copiapó y el puerto de Caldera, ciudad fundada en la misma época.





El pueblo Juan Godoy, que surgió a los pies del mineral, ofreció a sus 14.000 habitantes hacia 1860, una infraestructura completa con Iglesia, Hoteles y oficinas, logró tener más población que Vallenar y Freirina.
La mina que produjo grandes riquezas a CHILE y sus habitantes dejó de funcionar hacia 1875.

Hoy sólo quedan sus ruinas, cimientos de piedra y los restos de un gran cementerio.

SOLO QUEDAN LAS RUINAS

Hoy solo se observan las ruinas del poblado, su cementerio, la zona de explotación del mineral y socavones, son estas cosas únicamente las que dan testimonio de un pasado tan importante.



Muchos de los antiguos piques están abiertos, Debido al alto riesgo, no se recomienda entrar a estas antiguas minas.
Un ejemplo es el pique vertical de la antigua mina Bandurrias de 300 m de profundidad, el cual se encuentra abierto, y sin ningún tipo de protección,

¡Mucho cuidado, especialmente cuando se visita el lugar con niños!

¿COMO LLEGAR?

Desde Copiapó: 59 km al sur este.
por la Panamericana Copiapó Vallenar hacía el sur, hasta el cruce marcado. De ahí se dirige un camino de ripio en buen estado hacía las ruinas de Chañarcillo.

Tiempo para llegar: aprox. 45 minutos.

Otra Ruta

Desde Pabellón (Valle Copiapó): 42 km por un camino de tierra. Para esta ruta es necesario usar un Vehículo doble tracción.




Una vez llegado ahí encontrarán el testimonio de parte de la historia atacameña, solamente ruinas y soledad es lo que queda de este antiguo Mineral de Plata.



OJALÁ QUE A COPIAPÓ NO LE PASE LO MISMO, ATENCIÓN ATACAMEÑOS!!!!

QUE AL MENOS LA MITAD DEL ROYALTY, SE QUEDE EN LAS REGIONES.

QUE EL DINERO DE REGIONES SIRVA AL DESARROLLO DE ELLAS, SIEMPRE CON UNA MIRADA DE FUTURO Y NO CORTO PLACISTA. EL MINERAL SE ACABA, PERO LA AGRICULTURA Y EL TURISMO NO, QUE EL DINERO DE LAS MINAS SE INVIERTA EN ESO, TAMBIÉN EN CARRETERAS Y PORSUPUESTO EN UN MEJOR NIVEL DE VIDA PARA LOS ATACAMEÑOS.

QUE VIVA ATACAMA!!!!!!!!


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